Los vehículos que salen de la división M de la planta de Múnich de BMW han sido, históricamente, unos de los más apasionantes para los conductores. Sin embargo, a efectos de diseño se trataba de equipar los excepcionales chasis de la marca con los motores más poderosos que eran capaces de producir. Así, un M5 era un Serie 5 con ligeras modificaciones estéticas –con el paso de las generaciones, estas se fueron haciendo cada vez más evidentes–, hasta que permitieron que esta división crease modelos específicos. Uno de ellos es el XM, un SUV de grandes dimensiones que, en su versión Label Red, es el BMW de producción más potente de la historia. Esto se debe a su sistema híbrido enchufable, en el que un motor V8 de gasolina de 4.4 litros está unido a un propulsor eléctrico de 145 kW (197 caballos). Juntos, son capaces de desarrollar 748 caballos de potencia y más de 1.000 Nm de par, así como recorrer 48 kilómetros en modo 100% eléctrico. A efectos prácticos, esto supone que el coche tiene unas prestaciones absurdas. Y etiqueta Cero. Pudimos ponernos tras el volante del SUV en una presentación de las novedades en la gama de BMW, en donde un recorrido por carreteras secundarias hizo patente su aceleración hasta los 100 km/h en 3,8 segundos. De nuevo, absurda para un vehículo que pesa 2.700 kilos. El BMW XM es uno de esos proyectos en los que es sorprendente que los directivos dieran su aprobación –especialmente en el ecosistema de la industria de automoción actual, en la que los márgenes están bajo el escrutinio más estricto–. Por ello, solo habrá una generación del modelo, que se seguirá produciendo hasta 2028. Dado que también está en lo alto de los precios de la gama de BMW, con más de 240.000 euros, el XM cuenta con lo mejor de lo que dispone el fabricante. Su interior está excepcionalmente acabado y cuenta con el sistema multimedia más avanzado del mercado y un head-up display capaz de recoger muchísima información con nitidez. Las líneas exteriores son angulosas y futuristas, con los clásicos riñones de las tomas de aires de la marca con un tamaño enorme e iluminación a su alrededor, de manera similar a la que lo hace su buque insignia, el sedán Serie 7. Lo que más sorprende del XM Label Red, sin embargo, es lo ágil que se siente para medir 5,11 metros. En el momento en el que entra en juego el motor V8, que es pronto, el rugido y la entrega de par hace que sea adictivo, aunque algo intimidante, apretar el acelerador. El eje trasero es direccional y cuenta con barras estabilizadoras activas para poder contener esta potencia de una forma manejable en un paquete de estas dimensiones. La edición Label Red cuenta con unos frenos de mayores dimensiones, que son una mejora considerable con respecto a la edición de base (que cuenta con 100 caballos y 200 Nm menos) y soportan mejor las temperaturas que es capaz de generar este vehículo.
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Author : (abc)
Publish date : 2024-08-01 09:00:05
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BMW XM Label Red, el BMW más potente de la historia
