El 15 de marzo de 1985 era viernes. No se cabía en el Gran Poder por la cantidad de devotos que acababan de asistir al vía crucis que se reza cada Cuaresma y a sacarse la papeleta de sitio. De repente, un grito encendió todas las alarmas: «¡Traedme extintores!». Era el capiller, que intentaba apagar un fuego en la antigua sala de promesas, presidida por un cuadro del Señor. Una vela mal colocada provocó el incendio, cuya combustión se aceleró al mezclarse el agua con el aceite. Las llamas no cesaban y tuvieron que proteger al Señor con una capa contra el humo. La sala quedó completamente destruida, el marco acabó calcinado y, el cristal, derretido. Pero la foto en… Ver Más
Source link : https://www.abc.es/opinion/sevilla/javier-macias-prodigio-escayola-20241027010802-nts.html
Author : (abc)
Publish date : 2024-10-26 23:08:03
Copyright for syndicated content belongs to the linked Source.